Agite bien el inhalador durante 5 segundos antes de cada uso.
Retire la tapa protectora de la boquilla.
Exhale completamente para vaciar sus pulmones antes de inhalar la medicación.
Coloque la boquilla en su boca, sellando bien con los labios.
Presione el inhalador una sola vez mientras respira profundamente y lentamente.
Sostenga la respiración durante 10 segundos para permitir que el medicamento se asiente en los pulmones.
Exhale lentamente por la nariz o la boca.
Si necesita otra dosis, espere al menos 30 segundos y repita los pasos.
Coloque la tapa nuevamente después de usarlo.
Enjuague su boca con agua (si su inhalador contiene corticoides) para evitar irritaciones o infecciones.

Limpie la boquilla al menos una vez por semana con agua tibia y déjela secar completamente antes de volver a usarla.
Lleve siempre su inhalador consigo, especialmente si sabe que estará expuesto a desencadenantes de asma.
No exceda la dosis prescrita por su médico.
Revise regularmente la cantidad de dosis restante en el inhalador para evitar quedarse sin medicación.
Almacene el inhalador a temperatura ambiente, lejos de calor extremo o frío intenso.